viernes, 23 de marzo de 2012

Perdono luego olvido


“Perdono pero no olvido”. Un “pero” adversativo, un “pero” adversario, que me chirría en los oídos como una pura contradicción. Decir “no olvido” es declarar que se va a actuar en contra del olvido, que uno va a mantener vivo el recuerdo del dañador y el daño, para que no decaiga la vigilia, la vigilancia de quien nos hirió. ¿Cómo se va a poder perdonar si al mismo tiempo no se abandona esa memoria vigía? Contra esta contradicción, el pleonasmo: Perdono luego olvido.

2 comentarios:

CB dijo...

"Porque todos me conocerán, desde el pequeño al grande -oráculo del Señor-, cuando perdone sus crímenes y no recuerde sus pecados." (Jeremías,31:31-34). Acabo de oírlo hace un rato en la primera Lectura.
Gracias, Suso.

Jesús dijo...

Gracias a ti, CB.